Durante décadas, los combustibles fósiles tradicionales, como el gas y el petróleo, han sido utilizados para el calentamiento industrial pesado en todo el mundo. Ya sea que se utilice en la fabricación para reacciones químicas, esterilización, tratamiento térmico o secado, la calefacción industrial es común en muchas industrias.


Ahora, a medida que las organizaciones se comprometen a reducir sus emisiones de carbono, muchas recurren a la calefacción eléctrica para eliminar las emisiones de alcance 1 y de alcance 2 cuando se combinan con fuentes renovables de energía. Este cambio tiene un potencial significativo para reducir los efectos del cambio climático, dado que alrededor de un tercio de las emisiones globales de CO2 provienen de procesos industriales, incluida la calefacción.

Tradicionalmente, las fuentes de bajo voltaje eran la única opción para la calefacción industrial. Ahora, con los avances en tecnología, el voltaje medio está disponible para aquellos que requieren cargas térmicas más altas, las que tradicionalmente estaban siendo satisfechas con los combustibles fósiles.

 

¿Cuál es la diferencia entre voltaje bajo, medio y alto?

 

Voltaje bajo, medio y alto son términos utilizados para describir los diferentes niveles de voltaje eléctrico o diferencia de potencial.

Bajo voltaje (Low Voltage, LV): Esto se refiere a niveles de voltaje por debajo de los 1000 voltios (1 kilovoltio o kV). Si bien puede diferir según el país, la mayoría de los sistemas de bajo voltaje comúnmente operan a voltajes entre 120 y 690 V y son comunes en aplicaciones residenciales, comerciales e industriales ligeras.

Voltaje medio (Medium Voltage, MV): El voltaje medio oscila entre 1 kV y 100 kV y es utilizado para redes de distribución eléctrica, como distribución de energía a vecindarios residenciales, edificios comerciales e instalaciones industriales. 

Alto voltaje (High Voltage, HV): Aquí es donde los niveles de voltaje están por encima de los 100 kV y por debajo de los 230 kV, lo que permite la transmisión de energía eléctrica a larga distancia, desde las plantas de energía a las subestaciones de distribución.

 

Por qué el voltaje medio es el camino a seguir para las soluciones térmicas industriales

 

Si bien las aplicaciones de bajo voltaje han sido el método tradicional para aplicaciones a pequeña escala, el voltaje medio se puede utilizar para procesos más grandes de la industria pesada. Los beneficios del voltaje medio son:

Bajo costo de propiedad

Los sistemas eléctricos de media tensión reducen los costos de instalación y ciclo de vida debido a la capacidad de operar directamente desde un sistema de distribución existente. Esto elimina la necesidad de contar con transformadores reductores específicos y tendidos de cables complejos.

Eficiencia mejorada

Operar a voltajes medios aumenta la eficiencia de la distribución y el consumo de energía. Un sistema de bajo voltaje funcionará con una eficiencia de aproximadamente el 96 % en comparación con el voltaje medio, lo que maximiza la eficiencia a casi 100 %.

Cero emisiones

La calefacción eléctrica no tiene emisiones en el sitio en comparación con los sistemas de combustibles fósiles, lo que elimina las emisiones de alcance 1. Cuando esa electricidad se genera a partir de una fuente renovable, proporciona una solución completamente libre de emisiones, lo que reduce las emisiones de alcance 2.

Facilidad de mantenimiento

Los elementos eléctricos no tienen piezas móviles, menos infraestructura y son fácilmente reemplazables, lo que permite ciclos de mantenimiento más rápidos. Esto, a su vez, minimiza el tiempo de inactividad en comparación con los sistemas de combustibles fósiles más complejos.

Los sistemas de calefacción de media tensión son ahora la forma preferida de proporcionar calor a la industria pesada con cero emisiones. DirectConnect™ de Chromalox es la solución líder de voltaje medio disponible hoy en día, apoyando a las empresas de todo el mundo en su impulso hacia la descarbonización.